Cincuenta años
Cintra, año 1959, un pueblo del interior del país como tantos otros, con el esfuerzo y sacrificio de los mayores y con el desarraigo de sus jóvenes que podían y debían emigrar por falta de trabajo y de estudios secundarios.
Una visionaria, una soñadora, una emprendedora, la Directora de la Escuela Primaria Juan Bautista Alberdi, Elda Asís de Plenazzio, quien con un grupo importante de personas del pueblo, soñó y se imaginó una Escuela Secundaria para todos los jóvenes cintrenses.
La primera idea fue un Bachillerato, pero allí estaba otro tozudo personaje que había arribado al pueblo, el Dr.Alceo Galimberti, quien discutió y consiguió que fuera la Escuela Superior de Comercio “JOSE MANUEL ESTRADA”.
Y así nació y creció, por la fuerza y el empuje de los pobladores de Cintra , quienes vieron un futuro para sus hijos, quienes debieron luchar a brazo partido para crearla y sostenerla en el tiempo, ya que sus primeros años no tuvieron el aporte estatal que les permitiría respirar tranquilos y relajarse pensando que todo estaba resuelto.
Pero como toda empresa que se funda en el amor, en la abnegación y en el sacrificio, esta Escuela ubicada en el interior del interior, salió adelante, y además contó con muchísimos docentes que le dieron su impronta y sus características particulares, con innumerable cantidad de alumnos y además con extraordinarios directores ( Elda Asís de Plenazzio, Dr. Alberto Sassón, Dr. Alceo Galimberti, Pedro Paladini, , María Luisa Pretti y finalmente Liliana Stuppa de Bergero.
Año 2009, 18 de abril, cincuentenario del actual IPEM 324 “ JOSE MANUEL ESTRADA”, día maravilloso para todos los que transitamos sus aulas. Recuerdos, nostalgias, reencuentros, saludos, besos, lágrimas y sonrisas, todo aunado en el patio de la escuela, tanto directivos, ex directivos, docentes, ex docentes, alumnos y ex alumnos sintiendo la misma emoción e igual alegría por este cumpleaños de nuestra querida escuela.
Tal vez se notó una mayor participación y emoción entre los que ya peinamos canas , los más adultos, pues algunos hacía más de 40 años que no nos veíamos o no nos reencontrábamos, en cambio los más jóvenes fue menor su concurrencia dado que cotidianamente concurren a los mismos lugares y frecuentan las mismas actividades.
Todo lo que vivimos entre las 18 hs. de ese día hasta el amanecer del día siguiente fue emocionante y nos llegó al corazón de cada uno de los que allí estábamos: las palabras de la Directora, de las Inspectoras, las de un ex alumno, la entrega de presentes , la música interpretada en piano por el nieto del Dr. Galimberti y el cierre espectacular del tenor Daniel Pomba quien nos hizo escuchar y nos llevó a elevar una agradecimiento a la virgen con el Ave María.- Informe: Marta Oitana